Cuatro nueves del Tarot

LOS NUEVES

El nueve es el número de las cuestiones humanitarias, la perfección y el amor superior. La cuestión de la satisfacción y el deseo de seguir adelante es pertinente siempre que aparezca un nueve en una tirada. Tanto el nueve de copas como el de oros son cartas de buen augurio y significan la consecución superior de un ideal, pero el nueve de espadas y el de bastos son mucho más desafiantes.

 

Nueve de copas

Se trata de la carta del deseo y promete la autorrealización. Se indica felicidad verdadera y satisfacción en el amor. Es una carta de buen augurio si el consultante va a casarse o a comprometerse de forma emocional. Esta estabilidad emocional y material permitirán al consultante sentirse en paz consigo mismo y son el mundo. Si debe tomar una decisión, el consultante deberá seguir su corazón. Invertida, el consultante puede mirar más allá de la mera satisfacción hacia un nivel más profundo de felicidad.

 

Nueve de bastos

Esta es la carta del valor y la determinación para alcanzar el éxito, independientemente de la oposición o los obstáculos que se presenten. El consultante se encuentra en una posición fuerte desde la que puede avanzar porque intuitivamente sabe que está equipado para hacer frente a los retos que se le presenten. Debe prepararse para un revés en el camino hacia su objetivo y reconocer que tiene una reserva de fuerzas para seguir hasta el final. Invertida, desfallecen las fuerzas.

 

Nueve de oros

Esta carta describe bienestar, alegría y una fuerte sensación de autoestima. El consultante ha trabajado duro y ahora puede recoger los beneficios. Puede enorgullecerse de sus logros de forma justificada y saber que se ha ganado la profunda sensación de bienestar y satisfacción. Existe una fuerte sensación de unicidad y valor de lo que tiene que ofrecer y una apreciación de sus habilidades. El hecho de que no dependa de la aprobación de los demás para reconocer su valor le aporta fuerza y seguridad. Invertida, indica imprudencia al recoger los frutos de su trabajo.

 

Nueve de espadas

Una sensación de ansiedad y desesperación acompañan a esta carta. Tal vez el consultante tiene pesadillas o pensamientos negativos y esta angustia le estresa y deprime. Su sentimiento de culpa por algo ocurrido puede crear una sensación de presagio. Esta carta puede indicar sufrimiento pasado difícil de olvidar. Estos miedos pueden convertirse en una profecía propensa a cumplirse, por lo que el consultante debe reconocer el papel que desempeñan en la creación de su realidad presente. Así, pronto se percatará de que esta situación no es tan desoladora como imaginaba. Si ha estado enfermo o ha padecido una pérdida, pronto se recuperará y recobrará la fe.

Bibliografía:

BANZHAF, H. (2000): Las llaves del Tarot, Madrid, Edaf.

LIONNET, A. (2003): Los secretos del Tarot. Köln, Taschen.