Mito, arquetipo e interpretación de Urano, Saturno y Venus

Los nombres de los planetas provienen de la antigua mitología griega y luego la romana. Cada Dios-Planeta representaba una fuerza y principios vivos del universo. Es decir, un arquetipo, con características definidas.

Urano

La diosa Gea (Tierra) concibió sola y dio a luz a su hijo primogénito Ouranos, que significa ‹cielo› en griego. Aunque el nombre romano para el dios era Caelus, la ortografía latina del nombre griego Ouranos era Urano, del que deriva el nombre de un planeta moderno. Llamamos a Urano un planeta "moderno" porque, al no ser visible a simple vista, este planeta era desconocido para los antiguos. El planeta Urano se llama así porque está adyacente a Saturno. Saturno era el hijo de Urano. Como Urano no es uno de los siete cuerpos celestes en movimiento que son visibles a simple vista, no está asociado con ninguno de los siete días de la semana. En astrología, Urano está asociado a los tiempos modernos (aunque no originalmente) y con el signo zodiacal Acuario.

Arquetipo: Urano representa el principio de cambio, de libertad, rebelión y revolución. Se asocia con fenómenos inesperados de todo tipo, con sorpresas y despertares repentinos, con avances: intelectuales, psicológicos, espirituales. Gobierna la ruptura repentina de las estructuras establecidas y tiende a tener una calidad emocionante y eléctrica. También rige el individualismo y la originalidad, la invención y la tecnología, el genio creativo y la brillante comprensión mental. Urano personifica Lo salvaje del alma. Urano es el Hombre (Mujer) Salvaje o el Científico Loco, o el Rebelde: esa parte de nosotros es ferozmente independiente, no le importan las opiniones de las personas, y mucho menos reglas y normas. Comprensiblemente, el Hombre Salvaje provoca miedo en la parte más civilizada de nuestro ser. Al igual que otros planetas exteriores, Urano debe integrarse de alguna manera en la expresión general de la psique antes de que podamos experimentar su intensidad de una manera saludable.

En el horóscopo natal: Como es un planeta de movimiento lento (con un promedio de 84 años alrededor del zodíaco), Urano trabaja a nivel colectivo. Por lo tanto, para tener una idea de cómo afecta Urano personalmente en la carta natal, se debe observar en qué casa aparece y qué tipo de aspectos hace a los planetas personales, el Ascendente y el Medio Cielo. Urano muestra dónde el espíritu de independencia y libertad se manifiesta en el nativo. Urano muestra donde uno tiende a la originalidad, la independencia, la libertad. Rige la ciencia de la Astrología.


Saturno

Cronos (equiparado a Saturno en la mitología romana) era el principal (y en algunos mitos el más joven) de la primera generación de titanes, fue el líder de los descendientes divinos de Urano , el cielo y Gaia, la tierra, Gea. Urano y Gea fueron los padres de la primera generación de titanes, así como los ancestros de la mayoría de los dioses griegos. Cronos fue el último de los Titanes originales, y no debe confundirse a Chronos, personificación del tiempo, con Cronos, rey de los Titanes y dios del tiempo «humano» (de la agricultura y las cosechas, del calendario, las estaciones), hijo de Urano y Gea, y padre de Zeus.
Hesíodo, en su Teogonía, narra que Urano retenía a sus hijos en el seno de su madre cuando estaban a punto de nacer. Gea enfurecida urdió un plan para vengar el ultraje: talló una hoz de pedernal y pidió ayuda a sus hijos. Solo Cronos, el menor de ellos, estuvo dispuesto a cumplir con su obligación, emboscó a su padre cuando yacía con Gea, lo castró con la hoz y arrojó los genitales tras él. Con este acto, Cronos se convirtió efectivamente en el dios supremo durante una larga temporada. Durante su gobierno, la humanidad era una ‘raza dorada’ que, como los dioses, «…vivía con corazones felices… sin agobiarse por trabajar o por tristeza. La vejez nunca apareció. En paz, vivían con todas las necesidades…» (Hesíodo: Obras y días).
Finalmente, Cronos (Saturno) se asoció con la agricultura, la cosecha, y una Edad de Oro para la humanidad. Considerando la asociación de Saturno con una Edad de Oro, resulta apropiado que Saturno fuera el planeta regente original del signo zodiacal de Acuario, ya que la llamada “Era de Acuario” está, en la psique colectiva, ahora asociada con una especie de “Nueva Era”. La asociación con la agricultura lleva a una representación irónica de Cronos (Saturno) como portador de una hoz —la herramienta empleada para castrar a su padre Urano— para la cosecha.
Saturno es el regente del signo de Capricornio, y era el regente tradicional de Acuario. El día sábado (en inglés Saturday) está regido por Saturno también, por ello lleva su nombre. Es el único día de la semana, junto con el lunes, que mantiene su origen latino en inglés, designado en referencia al dios romano Saturno asociado con el Titan Cronos, padre de Zeus. Su denominación en latín era dies Saturni, ‘Día de Saturno’.

Arquetipo: El arquetipo detrás de la mitología de Saturno comienza con Cronos, hijo de Urano y Gea, quien fue representado sosteniendo una hoz porque estaba asociado con la cosecha. Los ciclos de tiempo involucrados en la cosecha le dan a Saturno la reputación de la necesidad de paciencia durante los largos ciclos de siembra y cosecha. Más tarde, se convirtió en Saturno en Roma y la misma mitología está detrás de la Saturnalia o el festival de la cosecha celebrado en otoño. Saturno representa el principio de límite, estructura y necesidad. Gobierna el mundo material, el tiempo, la tradición, el pasado, el envejecimiento, la muerte y el final de las cosas. El arquetipo de Saturno está asociado con la figura mítica griega de Kronos, el severo padre de los dioses, el Saturno romano. Llamado el Gran Maléfico en astrología tradicional, está asociado con figuras arquetípicas como Destino, El Padre Tiempo, y Muerte. Saturno es un arquetipo especialmente complejo, ya que también es el Maestro, el Gobernante, el Viejo sabio, el Padre estricto, y hasta el Sirviente. Saturno representa la estructura dura de las cosas, el principio de realidad, el resultado final. Saturno es el arquetipo que rige la estructura de nuestras vidas. Es la matriz de las cosas, lo que proporciona límite y estructura, permitiendo así la posibilidad de manifestación misma. Al limitar y traer el cierre, Saturno define. Saturno es también el principio del juicio, que gobierna las consecuencias de nuestras acciones y nos confronta con nuestro pasado. Esotéricamente, se considera el planeta del karma, el portador del karma de vidas pasadas, cuyas consecuencias ahora tenemos que enfrentar en la vida presente. Puede verse como la cruz que llevamos, porque se refiere a nuestras pruebas y sufrimientos que a menudo pueden parecer inexplicables e inmerecidos. Saturno se parece a algunos aspectos (aunque no todos) del hebreo Yahweh: el estricto gobernante patriarcal y legislador de la creación, el Dios de la justicia y la retribución que condena a la humanidad a una vida de separación, trabajo, sufrimiento y enfermedad, dolor en el parto y muerte. Saturno es el señor del reino de la finitud, la imperfección y la mortalidad. En un nivel profundo, Saturno puede ser visto como el trabajo arquetípico de la existencia: lo que constriñe y limita, rigidiza, enajena, separa a uno de la unión primaria, pero también lo que nos encarna, nos da encarnación, forma, firmeza, sustancia, realidad material, la estructura, la responsabilidad y la paciencia.

En el horóscopo natal: La posición de Saturno a través de los signos y las casas de una carta astrológica puede mostrar el área de la vida donde nos sentimos más desafiados. El propósito de Saturno en la carta natal es identificar lo que necesitamos hacer bien. Como un tipo de energía opuesta al sentido de expansión de Júpiter, Saturno puede restringir o enfocarse más en la disciplina y la construcción de estructuras. La ubicación de Saturno puede revelar aspectos de lo que podría ser de naturaleza kármica. Podemos sentirnos deficientes en esta área o calidad, pero el hecho de que estemos impulsados por un tipo de juicio y perfeccionismo significa que estamos aprendiendo a sobresalir en ello. Saturno en la carta astrológica natal indica cómo uno procura establecerse y preservarse a través del esfuerzo.



Venus

Si bien nuestros sentimientos modernos pueden encontrar inquietante el hecho de que Saturno naciera de una relación incestuosa entre Gea y su hijo Urano, podemos encontrar el origen de la próxima deidad aún más inquietante. Después de que Cronos (Saturno) castrara a su padre, los genitales de su padre cayeron al mar, donde «la espuma blanca rodeaba la carne inmortal» (Hesíodo, Teogonía). Los genitales de Urano produjeron una espuma de la que nació Afrodita Urania. Esta espuma blanca se convirtió en una hermosa mujer: Afrodita, la diosa del amor y la belleza. De hecho, Hesíodo vincula el nombre mismo ‘Afrodita’ a este origen inquietante, diciendo que el nombre proviene de la palabra aphros, palabra griega para ‹espuma›, e interpretándose como ‘surgida de la espuma’. El nombre romano de Afrodita es Venus.
El planeta Venus lleva el nombre de la diosa de la belleza y del amor porque, además de la Luna, es el objeto celeste más brillante en el cielo nocturno, y de hecho es hermoso. El planeta Venus gobierna los signos Libra y Tauro. Venus también rige el día viernes, que hace referencia a la expresión latina dies Veneris, ‘Día de Venus’. Del nombre de esta diosa se desprenden acepciones, como la palabra ‹afrodisíaco›, y de su nombre en romano antiguo (Venere), provienen las palabras: Venus, venado, venial, venerar, venerado y venéreo (referido a lo sexual) y veneno, del latín venenum (poción mágica o medicinal, buena o mala) y está relacionada con la raíz indoeuropea *wen- (amar, venerar).

Arquetipo: Venus gobierna el deseo de involucrarse en relaciones románticas y sociales, atraer y sentirse atraído por otros, participar en actividades artísticas, buscar armonía y placer estético o sensual. El arquetipo de Venus está asociado con la figura mítica griega de Afrodita, la Venus romana, la diosa del amor y la belleza. Los aspectos principales que involucran a Venus tienden a correlacionarse con la forma en que uno da y recibe amor y afecto, la naturaleza de las relaciones sociales y románticas, y el carácter del impulso artístico y la sensibilidad estética. Venus se asocia con la búsqueda del placer de la fertilidad (en analogía a la diosa fenicia Astarté), la búsqueda de la armonía (gobernante de Libra) y la domesticación y la fertilidad (gobernante de Tauro). La diosa del amor y la belleza retrata el lado de la persona que desea ser agradable, cómo socializa con otros. Venus puede relacionarse con el hemisferio derecho del cerebro y muestra cómo nos relacionamos con los demás, ya sea social o amorosamente. Venus puede mostrar también nuestra capacidad de creatividad artística y cómo nos comportamos socialmente. Venus representa el arquetipo de la Amante, el Amor romántico universal, la Belleza, la Armonía, lo sagrado femenino.

En el horóscopo natal: Venus describe cómo la persona ama y a quién ama y cómo son las relaciones en general. Venus retrograda aproximadamente cada año y medio o dos, y permanece retrógrado durante aproximadamente seis semanas, durante las cuales las relaciones de todos se ejercitan de verdad. Venus marca el camino a través de asuntos relacionados con el corazón y la sensibilidad estética. La colocación natal de Venus indica cómo y dónde debemos desarrollarnos en el amor. El signo de Venus define cómo experimentamos mejor la conexión emocional con los demás, mientras que la ubicación por casa sugiere en qué área tendremos que enfocarnos para desarrollar nuestra capacidad de amar. Venus en la carta natal muestra cómo uno expresa afecto, se siente apreciado y da de sí.


Bibliografía:
• Andreu, Teresa. (2002): Astrología y mitología: los mitos que vivimos, Barcelona, Editorial Índigo.
• Bailey, Alice. (1983): Los Trabajos de Hércules, una interpretación astrológica, Madrid, Luis Cárcamo, editor.
• Bailey, Alice. (1989): Tratado sobre los siete rayos, Astrología Esotérica, Volumen III, Ed. Fundación Lucis, Buenos Aires.
• Graves, Robert. (2011): Los Mitos Griegos, vols. I y II, Madrid, Alianza Editorial.
• Guttman, Ariel; Guttman, Gail; Johnson, Kenneth. (2005): Astrologia e Mitologia. Seus Arquétipos e a Linguagem dos Símbolos, São Paulo, Madras Editora.
• Hard, Robin. (2008): El gran libro de la mitología griega, Madrid, Editorial La Esfera de los Libros.
• Hesíodo. (1982): Teogonía. Trabajos y días. Escudo de Heracles, México, Editorial Porrúa.

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