1889 – El Tarot de Oswald Wirth

Joseph Paul Oswald Wirth (1860-1943). Ocultista y francmasón, nació en Brienz, Suiza; debatió las teorías de Antoine Court de Gébelin (1719-1784) sobre el origen egipcio del Tarot y sus inciertas referencias al libro de Toth. Según la tesis de Court de Gébelin, los jeroglíficos secretos una vez que fueron reproducidos sobre tabletas portátiles, habrían pasado a los gnósticos, después a los alquimistas, a partir de los cuales fueron difundidas. La arqueología no ha descubierto el menor trazo que podría constituirse como vestigio de un Tarot egipcio, gnóstico o incluso alquimista greco-árabe”.
Oswald Wirth consideraba al Tarot como un “tratado de filosofía en imágenes” que permite al hombre abrir su espíritu, de desarrollar su imaginario gracias a símbolos, que funcionan como una especie de ventanas hacia el infinito y que se abren solamente para quien se inclina ante los arcanos del Tarot y medita en el silencio de su corazón. La clave, como la llama Wirth, está allí para ayudarnos a franquear el umbral del enigma. Así nos incita a efectuar un viaje y explorar un mundo desconocido que está allí, esperándonos.
La lámina correspondiente a EL COLGADO, es la única donde aparece el nombre de Wirth y la fecha y lugar de creación de este tarot.
Bajo las indicaciones de con su amigo, mentor y mecenas, el conde Stanislas De Guaita (1861-1887), Wirth diseñó los 22 arcanos arcanos publicados en 1889 en la obra Les 22 Arcanes du Tarot Kabbalistique. Dessinés a l’usage des Initiés. Sur les indications de Stanislas de Guaita (Los 22 Arcanos del Tarot Cabalístico. Diseñado para el uso de los iniciados. Bajo las indicaciones de Stanislas de Guaita) de la que sólo se imprimieron 350 ejemplares. Uno de estos ejemplares se halla en el British Museum.

En 1911 comenzó a publicar una serie de artículos bajo el título Les Arcanes du Tarot (Los Arcanos del Tarot) en la revista La Lumiere masonik. Para esta publicación Wirth rediseñó a los 22 arcanos.

Oswald Wirth consideraba que esos primeros trabajos estaban incompletos. Continuó estudiando el simbolismo de las imágenes de acuerdo con el espíritu medieval y la relación del Tarot con la alquimia, el hermetismo y filosofía cabalística medieval. El resultado de estos estudios fue la publicación en 1926 del Tarot des imagiers du Moyen Âge (Tarot de los Pintores de la Edad Media), donde los arcanos cambian de diseño y toman colores diferentes, más suaves, en tonalidades más tenues, menos brillantes, con fondos dorados; con esta obra pretendía restituir a los arcanos mayores su pureza primitiva, que emplaza a la filosofía cabalística medieval como origen del Tarot, contrariamente a la teoría del origen egipcio sostenida por Court de Gebelin.
En sus estudios sobre los arcanos, Wirth proporciona la interpretación simbólica y adivinatoria de cada una de las láminas y añade su método de adivinación. En cuanto a las láminas, se observan modificaciones en relación con los diseños de los Tarots de Marsella tradicionales y el de Court de Gebelin; de este modo se aprecia que, al Colgado, que Court dibujo de pie, Wirth le devuelve su posición invertida colgado del tobillo, y en casi todas las láminas se perciben pequeñas diferencias, tanto en el dibujo como en el color. No obstante, en lo esencial reflejan con fidelidad el sentido esotérico tradicional de los Arcanos del Tarot.


En 1966 se realizó una restauración del Tarot de Wirth; pero, los colores empleados para ello distan mucho de ser semejantes a los originales. Posteriormente se han incluido, por algunas editoriales de barajas de tarot, los arcanos menores que no fueron diseñados por Wirth.
La incorporación de los 22 arcanos mayores a los arcanos menores es renacentista, reuniendo todas las imágenes de un juego destinado a la diversión y a la vez a la instrucción. Según Oswald Wirth, a las cartas numerales se le añadieron las figuras provenientes del juego de ajedrez, originario probablemente del Lejano Oriente e introducido en Europa por los árabes en el siglo X. Los cuatro palos del Tarot que determinan las cuatro familias de cartas numerales harían una clara referencia a los cuatro elementos alquímicos.

Bibliografía:

  • BAYARD, Jean-Pierre (1999): El Gran Libro de La Práctica del Tarot. Simbolismo e Interpretación, México, Suromex Ediciones.
  • DARCHE, Claude (2014): Le Tarot Divinatoire, Paris, Eyrolles.
  • SALAS, Emilio (2009): El gran libro del tarot, Barcelona, Ediciones Robinbook S.L.
  • WIRTH, Oswald, (1926): Tarot des imagiers du Moyen Âge, Paris, Le Symbolisme.

Comentarios

David Molto ha dicho que…
Es curioso comprobar como la asociación de Arcanos Mayores y letras hebreas es diferente en los Tarot de Wirth y Crowley, también existen dos diagramas del árbol de la vida y dos formas de posicionar las letras en los senderos que unen las sefirot. Se puede generar luz y combatir la oscuridad. Saludos y gracias por el artículo, muy bien documentado.
IЯERI CALDERÓN ha dicho que…
Gracias por tu comentario David Molto.
La diferencia de la secuencia cabalística del tarot entre Wirth y Crowley se debe quizá a que la Golden Down la re-interpretó, por eso hay una escuela francesa y otra inglesa en el tarot.
Saludos.