La Luna a través de los signos zodiacales

Simbólicamente, la Luna representa lo femenino, el subconsciente, el pasado, la familia, la mujer, la madre, las emociones y las raíces. Es el planeta que rige al signo de Cáncer. Al igual que los equinoccios y los solsticios, sus fases juegan un papel sumamente importante en los acontecimientos que se suceden con todos los seres vivos en nuestro planeta.

Las 13 lunaciones del año nos muestran “un viaje” en relación a nuestro centro, la Tierra. Cada lunación corresponde a la Luna Nueva en cada signo del zodíaco y tiene su efecto sobre nuestra realidad.

En un año, realiza 13 recorridos alrededor de nuestro planeta, es decir, se producen 13 lunaciones en el año. La Luna tarda 29 días y medio en dar la vuelta a la Tierra y cambia de signo zodiacal cada 2 o 3 días (aproximadamente, cada dos días y medio la Luna cambia de signo zodiacal y cada 28 días se completa el recorrido zodiacal). Esto significa que cada 28 días el satélite estará en un signo y permanecerá en él un promedio de 60 horas durante las cuales ejercerá su influencia.

El signo indica lo bien que estamos haciendo las cosas. Como la Luna rige el carácter emocional del día, es bueno saber cuál es el estado de ánimo en un momento dado.

La Luna a través de los signos

Aries

La Luna en Aries es testaruda, impulsiva y enérgica. En este periodo nos sentimos malhumorados y quizás con ganas de discutir. Es cuando hasta los más mansos no temen plantarse para proteger sentimientos personales. Como Aries es el primer signo, es un punto de partida natural para toda clase de proyectos y es un momento maravilloso para canalizar toda esa energía de «yo primero» para iniciar cambios y nuevos comienzos. Tan sólo vigila la tendencia a ser demasiado impulsivo y a estresarte.

Tauro

La Luna en Tauro es la Señora en la cúspide de su solidez y sensualidad, al sentirse segura y bien enraizada. No hace falta estresarse ni correr y definitivamente no hay necesidad de cambiar nada. Tendemos a resistir cualquier cambio cuando la Luna se encuentra en este signo y, en especial, los cambios que no provocamos nosotros. Quedarnos quietos, tener una cena espléndida, escuchar buena música, disfrutar de la belleza de la Tierra, contemplar una puesta de Sol o una obra de arte o cuidar de las finanzas u otros recursos son cosas típicas de la Luna en Tauro.

Géminis

Este signo mutable se mueve tan rápido que, cuando la Luna está presente, nos sentimos algo más inquietos que de costumbre. De pronto estamos de humor para conversaciones, enigmas, acertijos y juegos de palabras. Como poco, queremos al menos dos ejemplares de cada cosa. Es un gran momento para escribir cartas, llamar por teléfono o realizar breves viajes. Es cuando encontrarás los mejores atajos y donde necesitarás tomarlos. Cuidado con la tendencia de volverse un poco disperso bajo la influencia de esta divertida y voluble Luna.

Cáncer

La Luna en este signo de agua cardinal se encuentra en su salsa más maternal y sus cuidados se orientan hacia el hogar, la familia, los hijos y las madres. Expresamos nuestras emociones, somos simpáticos y comprensivos unos con otros. A menudo nos encontramos con ganas de cuidar de alguien, de cocinar o de abrazar a nuestros seres queridos. En ese periodo, los sentimientos son muy intensos y hay que vigilar la tendencia a volverse hipersensibles, dependientes o necesitados. Con todo, es un momento muy bueno para retozar por la casa, recibir a la familia y ocuparnos de los asuntos domésticos.

Leo

Cuando la Luna se encuentra en Leo, suena la hora del Espectáculo, con E mayúscula. Ese signo teatral es famoso por sus grandes entradas, su amor por las demostraciones y su necesidad de atención. Cuando la Luna se encuentra en este signo, todos sentimos la necesidad de ser reconocidos, aplaudidos y valorados. Ahora bien, toda esa excitación, ese orgullo y esa emoción pueden convertirse en un melodrama en un abrir y cerrar de ojos. Así, lo mejor es tener cuidado con sobreactuar o ser excesivamente vanidosos durante este periodo. Es un gran momento para ir a ver un espectáculo (o actuar en uno), ser románticos o expresar nuestros sentimientos con estilo aristocrático.

Virgo

Aquí, la Luna es sumamente discriminadora. Este signo es el más orientado hacia los detalles de todos, el que más se ocupa de solucionar, de disentir y servir. La Luna en este signo nos pone de humor para limpiar, frotar, seleccionar, arreglar desperfectos y ayudar. Virgo es el signo que más ayuda de todos, siempre listo para empuñar la escoba, la fregona o las herramientas de jardín y ofrecer su ayuda. Es cuando somos más conscientes con respecto a la salud, más orientados hacia el trabajo y comprometidos con las obligaciones. Es, por tanto, un gran momento para dedicar atención a nuestra dieta, nuestra higiene y nuestra agenda.

Libra

Cuando está en Libra, la Luna está más orientada hacia las relaciones y el compañerismo. Aunque la tarea de Libra es restaurar el equilibrio, quizás te encuentres en situaciones de desequilibrio emocional que exijan malabarismos con los platillos para enderezarlo. En general es un periodo sociable, cortés y amistoso donde los demás querrán cooperar y estarán más susceptibles de aceptar compromisos. Una Luna en Libra nos invita a embellecer nuestro entorno o a rodearnos de belleza. Es un buen momento para decorar, hacer compras para la casa o visitar lugares hermosos y elegantes.

Escorpio

Escorpio es el signo más intenso y en él la Luna siente todo de forma exacerbada y, por supuesto, nosotros también. La pasión, la alegría, los celos, la traición, el amor y el deseo pueden acaparar el escenario de nuestra vida porque nuestras emociones se hacen más profundas hasta rondar la obsesión. Cuidado con la tendencia a volvernos reservados, suspicaces u obsesivos con respecto a una ofensa no intencionada. Ahora es un gran momento para dilucidar misterios, investigar, cavar de verdad o simbólicamente y permitirnos intimar con alguien.

Sagitario

Aquí, la Luna roza el colmo del optimismo. Es cuando estaremos más dispuestos a que nos dé igual todo, a liberar y a reírnos de todo. Por supuesto, Júpiter es también el planeta de las largas distancias y de la educación de la mente superior y ese tiempo es ideal para salir dos días de aventura o participar en un seminario sobre temas que siempre te han interesado, como la filosofía o la espiritualidad. Este signo tiene el don de la profecía y el gusto por el conocimiento colectivo, las experiencias y la sabiduría. Cuando la Luna está en este signo, pasa tiempo al aire libre, sé espontáneo y ríete mucho y a carcajadas. Vigila sólo la tendencia al exceso, el desperdicio y la excesiva actividad.

Capricornio

Aquí, la Luna está perfectamente organizada, práctica y metódica. Saca a la luz nuestro lado laborioso, precavido y pesimista. Preferimos trabajar a jugar. Nuestras metas de futuro son lo único importante. Es el momento de orientarse hacia el negocio familiar, de actuar con responsabilidad, de encargarse de algo o de organizar las áreas de nuestra vida que se han vuelto dispersas o inestables. También es el momento de establecer reglas y líneas directrices, de sentarse con paciencia, de escuchar y aprender. Cuidado con la posibilidad de actuar de manera demasiado pragmática a expensas de las emociones ajenas.

Acuario

La Luna en Acuario despierta el rebelde en todos nosotros. Ahora tendemos a los actos extremos y abruptos. Estamos listos para romper la rutina, probar algo diferente y asegurarnos de que todos nos ven como los seres únicos que somos. Como este signo está regido por Urano, ahora la libertad personal y la individualidad son más importantes que cualquier otra cosa. Nuestros horarios se vuelven caóticos, y todas nuestras causas, urgentes. Cuidado con la tendencia a volverse fanático, actuar de manera rebelde sin motivo o romper la tradición sólo porque sí.

Piscis

Este signo pertenece al planeta Neptuno, que rige los estados alterados de la realidad. Cuando la Luna se desliza en ese signo, lo que exige es dormir, meditar, orar o tomar drogas o alcohol, cualquier cosa que induzca un estado similar al trance y que nos permita escapar de la dura realidad. Quiere persuadirnos, lanzarnos un hechizo, y convencernos de que todo está bien. Ahora estamos más expuestos a los asaltos emocionales de toda clase y nos sentimos confusos, soñadores, nostálgicos, melancólicos o impresionables. Es cuando estamos más espirituales, cuando nuestras barreras están más bajas, cuando somos más compasivos, intuitivos y sensibles a los que son menos afortunados que nosotros. Es el momento de participar en un grupo espiritual o una asamblea religiosa.

Fases de la Luna

Luna Nueva. Durante este corto tiempo en que la Luna permanece con su cara oculta (entre 2 y 3 días) es ideal ayunar, meditar, desintoxicar el organismo, eliminar hábitos negativos y podar árboles enfermos. Se recomienda cortar el cabello si se desea un acelerado crecimiento, con el detalle de que -a la larga- lo debilita. No se recomienda la depilación, ya que el vello crecerá más rápidamente. Cada Luna Nueva es una invitación a explorar un nuevo lugar de mi consciencia.

Cuarto Creciente. Esta fase dura casi 13 días. En esta época se recomiendan actividades que fortalezcan el organismo y lo revitalicen. Es buen momento para abrir cuentas de ahorro, solicitar préstamos, buscar empleo y para invertir o vender. Es conveniente para realizar enlaces, matrimonios, asociaciones y contratos de toda índole. También en esta fase, el corte de cabello hará que crezca de forma acelerada pero débil. No se deben podar árboles frutales.

Luna Llena. Aunque dura pocas horas, su efecto es muy notable. Las heridas sangran más, por lo que las cirugías resultan arriesgadas. La gente se pone más agresiva en esta fase. Se pueden recolectar hierbas medicinales. Lo que se inicia 6 horas antes o 6 horas después de la Luna Llena suele resultar exitoso. Durante la Luna Llena se incrementan los partos y las enfermedades nerviosas. Dicen que aquellos que tienen cabello muy fino y quieren aumentar su volumen, deben cortárselo en este período.

Cuarto Menguante. Es la fase lunar que más opciones ofrece para obtener óptimos resultados. Ideal para iniciar dietas de pérdida de peso, el organismo resistirá mejor el cambio de dieta y obtendrá resultados inmediatos. Durante este período es conveniente realizar todo lo que contribuya a eliminar del organismo las sustancias tóxicas y los elementos perturbadores, como los parásitos. Es el momento adecuado para eliminar manchas, extirpar verrugas, tratar cicatrices, etc. Los tratamientos odontológicos resultan más exitosos, al igual que cualquier tipo de cirugía. El corte de cabello en esta época lo hace crecer más lentamente pero con mayor grosor y con raíz más fortalecida y resistente. Es una excelente época para plantar y podar árboles frutales, para sembrar tubérculos o verduras, eliminar malas hierbas y combatir parásitos y plagas. En lo sentimental, es excelente tiempo para terminar una relación amorosa intensa y de larga duración como también para concluir una sociedad comercial.

La Luna Menguante es propicia para someterse a cualquier cirugía o para comenzar una dieta. Es el momento en que el satélite transmite calma y colabora en la cicatrización. También es tiempo propicio para meditar y aclarar ideas. Aunque el momento de llevar a cabo estos pensamientos y de actuar es cuando hay Luna Creciente. La Luna Llena hay que reservarla para actividades como cortar el pelo o las uñas para que crezcan más fuertes, en este momento la sangre está alterada.

La Luna Llena influye mucho en las personas según su horóscopo.

En general, la Luna Llena aporta más sensibilidad pero también más intolerancia y violencia. Los signos de Agua son los más lunáticos, es decir, son los más influidos por el satélite. Cáncer, Escorpio y Piscis, al ser agua, actúan como las mareas, cuando la Luna está en su signo se revuelven y emocionalmente se vuelven más sensibles. Los Escorpio llegan incluso a estados quisquillosos y exagerados.

Los signos de Fuego chocan frontalmente con la Luna. Esta, que es agua, lucha por apagar los impulsos del fuego, de esta manera Aries, Leo y Sagitario se vuelven sentimentalmente inestables, agresivos y excitados cuando se posa sobre ellos la Luna Llena. Tauro, Virgo y Capricornio son los signos de Tierra y, con la Luna Llena, pierden por completo el romanticismo, se enfrían y se aplanan. Les ocurre todo lo contrario que a los signos de Agua.

Los signos de Aire llegan a la cumbre de la inquietud y la curiosidad. Acuario, Géminis y Libra establecen, bajo los efectos de la Luna Llena, fuertes vías de comunicación con los demás y se vuelven más sensibles. Por el contrario, algunas Acuario se vuelven distantes.

Tauro, Virgo y Capricornio son los signos de Tierra. Estos reaccionan ante la Luna Llena con contundencia. Están más tensos, nerviosos, alterados y son es el momento en el que más decisiones toman, aunque no tienen por qué ser todas acertadas. De este grupo los Virgo son los más mentales y los Tauro los más sentimentales.

 

Bibliografía:

• HALL, Judy (2007): La Biblia de la Astrología, Madrid, Gaia.
• PARKER, Julia & PARKER, Derek (2001): Parker's Astrology: The Definitive Guide to Using Astrology in Every Aspect of Your Life, New York, Dorling Kindersley Publishing.
• ROGERS-GALLAGHER, Kim (2012): “Introductory Astrological Info”, en Llewellyn's Annual Calendar, USA, Llewellyn Worldwide Ltd.