Clasificación de los signos zodiacales: Cualidades primitivas

Cualidades primitivas: cálido y frío, húmedo y seco.

Una cuestión astrológica de gran importancia para entender la naturaleza esencial de los signos zodiacales es el de las cualidades primitivas (Cálido, Frío, Seco y Húmedo) y sus diferentes combinaciones.

Este medio original de clasificar los signos ayuda a comprender mejor la naturaleza básica del zodiaco tropical, y el uso práctico de este sistema, como una forma de delinear el temperamento básico en las cartas natales.

La implicación obvia de este sistema basado en las estaciones (que se invierten) para las personas nacidas en el hemisferio sur, la expresión de los signos se altera un poco.

Los elementos que se usan en Astrología son de origen griego clásico y tienen el mismo significado que tenían en la cosmología y ciencia griegas. Para los griegos, casi cualquier cosa, desde los procesos naturales hasta el temperamento humano, podría clasificarse como de la naturaleza del aire, el fuego, la tierra o el agua.

Los griegos, sin embargo, siempre utilizaron dos conjuntos de opuestos, las cualidades elementales, caliente y seco, frío y húmedo, para describir los componentes elementales de lo que estaban categorizando. Un ejemplo del razonamiento sería: el vapor es predominantemente activo (caliente) y sin forma (húmedo), por lo que es de la naturaleza del aire.

La versión más completa de este sistema fue presentada por Aristóteles alrededor del año 350 a. C. Aristóteles propuso que los elementos se combinaran de las cualidades de tal manera que un elemento pudiera cambiar a otro a través de un proceso cíclico. El modelo para este proceso de cambio fue el ciclo de las estaciones.

Estas ideas se desarrollaron completamente antes de que la Astrología ingresara al mundo griego. Esta es una de las razones por las cuales los intelectuales griegos de la época adoptaron tan fácilmente la astrología.

Los elementos como modos de comportamiento

Para los griegos no había separación entre la naturaleza y la experiencia humana. Al igual que los pueblos indígenas contemporáneos, vieron a los humanos y la naturaleza como parte del mismo continuo. Como tal, las teorías griegas del mundo natural intentaron explicar la realidad observable en términos del comportamiento de los procesos naturales como el modelo del comportamiento humano. Por lo tanto, los "elementos" griegos de aire, fuego, tierra y agua, nunca fueron considerados como los bloques de construcción físicos o químicos de la materia, sino que fueron caracterizaciones de modos de comportamiento, actividad o proceso.

Las primeras ideas griegas sobre el mundo natural aparecen alrededor del año 550 a. C. Las nociones centrales de "elementos" y "cualidades" se establecieron en este momento. En esta primera etapa, los cuatro elementos aire, fuego, tierra y agua se consideraron inmutables, y se pensaba que todas las cosas surgieron como resultado de una lucha elemental entre dos conjuntos de cualidades opuestas: lo cálido y seco versus lo frío y húmedo.

El modelo aristotélico de ser y llegar a ser

Doscientos años después (alrededor del año 350 a. C.), el modelo del mundo natural de Aristóteles tuvo una amplia vigencia. En términos de este modelo, cada elemento es una combinación de dos de los cuatro opuestos, y todo lo que existe es un compuesto temporal de los cuatro elementos en diferentes proporciones, siendo la tensión entre los opuestos la fuerza que mantiene las cosas juntas.

En aquella época, se consideraban que los elementos no eran inmutables, sino que estaban en un estado de cambio: uno puede cambiar a otro mediante el intercambio de una de sus cualidades. El proceso de cambio no es aleatorio o progresivo, sino cíclico. El proceso es cíclico porque una calidad activa (caliente o fría) siempre se combina con una calidad pasiva (húmeda o seca). Aristóteles llamó a esto el proceso de ser y llegar a ser.

Obviamente, el proceso ser y llegar a ser se adapta fácilmente a los procesos naturales, como el ciclo del día y la noche, y el ciclo de las estaciones en climas templados:

HORA	TEMPORADA	Ser y llegar a ser
Amanecer	Primavera	HÚMEDO llega a ser CALIENTE
Mediodía	Verano	CALIENTE llega a ser SECO
Oscuridad	Otoño	SECO llega a ser FRÍO
Medianoche	Invierno	FRÍO llega a ser  HÚMEDO

Todas estas ideas eran una parte establecida del pensamiento griego antes de que la Astrología se afianzara en el mundo griego antiguo. En otras palabras, la astrología encajaba muy bien con la cosmología y la filosofía de una sociedad agraria que veía el cambio como un proceso similar al ciclo de las estaciones.

Las cualidades elementales

En términos de este esquema aristotélico, el calor y el frío son descriptivos de diferentes estados de energía o actividad, por lo tanto, son las cualidades "activas". Por ende, una entidad caliente (o tibia) está en movimiento mientras que una fría está en reposo. Las cosas calientes, entonces, son cálidas, brillantes, gastan energía, son rápidas en movimiento y cambiantes. Las cosas frías, por otro lado, son heladas, oscuras, conservan energía, se mueven deliberadamente y tienden a permanecer igual.

Húmedo y seco son términos que también llevan la connotación de "blando" y "duro". Describen diferentes estados de la materia sobre los que se actúa, por lo tanto, son las cualidades "pasivas". Por ende, una cosa húmeda (o mojada) puede ser blanda, maleable, líquida o sin forma, mientras que una cosa seca puede ser dura, quebradiza, reseca o sólida.

Este sistema se usa para hacer distinciones entre la naturaleza de las cosas de la misma clase, y como un medio para hacer distinciones entre las cosas. Un ejemplo de lo primero son los alimentos que pueden describirse como cocidos (calientes), crudos (fríos), blandos (húmedos) o duros (secos). Un ejemplo de esto último son las relaciones espaciales, donde se dice que los lugares de baja altitud son cálidos y luminosos y los lugares altos son fríos y oscuros.

También vale la pena señalar que los griegos ya habían desarrollado una protopsicología basada en este sistema donde las cualidades elementales se aplicaban a los cuatro humores o tipos de personalidad: sanguina (húmeda y caliente), colérica (caliente y seca), melancólica (seca y fría) y flemático (fría y húmeda).

En términos de este esquema, cualquier cosa podría describirse como una combinación de su calidad activa y su calidad pasiva.

Implicaciones astrológicas de las cualidades elementales

La aplicación del sistema de cualidades elementales a la astrología tiene dos consecuencias principales.

1. Proporciona una comprensión simbólica más profunda de los elementos, lo que ayuda a comprender mejor la naturaleza de los signos.
2. Al incluir las cualidades elementales de las estaciones como un componente importante del significado de los signos, el sistema explica por qué hay diferencias de expresión entre los signos del mismo elemento.

En cuanto al primer punto, el uso de las cualidades elementales en Astrología nos muestra que cada elemento es una mezcla de dos cualidades, por ejemplo, el elemento fuego es una mezcla de calor y sequedad. Por lo tanto, obtenemos una visión más profunda de la naturaleza inherente de las triplicidades, por ejemplo, todos los signos de fuego son calientes y secos. Exploremos brevemente algunas de las implicaciones simbólicas de esto:

• Los signos de naturaleza caliente, los signos de fuego y aire, emiten energía y actúan rápidamente, se centran en las personas y las cosas que los rodean, son excitables y se comportan de manera entusiasta. Gastan energía, dinámicos, excitables, entusiastas, extrovertidos.
• Los signos de naturaleza fría, son signos de tierra y agua, atraen energía y son lentos para actuar, se centran en sus propios pensamientos y sentimientos, están controlados y se comportan de manera desapasionada. Conservan energía, estáticos, controlados, introvertidos, desapasionados.
• Los signos que son de naturaleza seca, los signos de fuego y tierra, son tensos y nerviosos, se relacionan al diferenciarse de los demás; piensan de manera analítica o concreta, haciendo distinciones, rompiendo vínculos y separando las cosas en partes unitarias. Rompen enlaces, singulares, analíticos.
• Los signos que son de naturaleza húmeda, son signos de aire y agua, son flexibles y relajados, se relacionan conectándose con otros; piensan de manera creativa o abstracta, borrando límites, haciendo conexiones y uniendo las cosas como un todo unificado. Crean vínculos, comunales, creativos, flexibles.

En cuanto al segundo punto, el uso de las cualidades elementales en Astrología nos muestra que se establece una relación crucial entre las cualidades elementales de las estaciones y los signos. Además, es esto lo que explica las diferencias de expresión entre los signos del mismo elemento. Por ejemplo, el signo de fuego, Aries, es inherentemente cálido y seco, pero cae en la estación cálida y húmeda de la primavera, por lo que Aries es cálido y ligeramente húmedo. Estas distinciones se pueden ver más claramente en la siguiente tabla:

En la tabla se puede apreciar, por ejemplo, que todas los signos de fuego son, por su propia naturaleza, calientes y secos. Sin embargo, la adición de las cualidades elementales de las estaciones da como resultado diferencias entre los signos de fuego.

Leo, que es el signo de pleno verano, recibe una dosis doble de calor y sequedad, y es el signo de fuego puro. Pero, Aries, que es un signo de primavera, es más húmedo (caliente y seco, caliente y húmedo), y Sagitario, que es un signo otoñal, es más frío (caliente y seco, frío y seco). Obviamente, esto explica y nos ayuda a comprender mejor las diferencias entre los signos del mismo elemento. En el caso de la triplicidad del fuego, se observa que: Aries es tan activo (caliente) como Leo, pero es más sociable (húmedo por estación) que Leo o que Sagitario; también se observa que Sagitario es tan discriminatorio (seco) como Leo, pero es menos asertivo (frío por temporada) que Aries o que Leo, y; que Leo es el signo puro de fuego: pone mucha energía (caliente) para establecer su propio carácter distintivo (seco).

¿Astrología tropical tradicional en el hemisferio sur?

En el hemisferio sur, el ciclo estacional se invierte. Si las cualidades elementales de las estaciones son cruciales para determinar las distinciones entre los signos del zodiaco, como parece ser el caso, entonces la forma en que las personas en el hemisferio sur expresan la energía de los signos será diferente.

Por supuesto, si sostenemos que el simbolismo astrológico es universal, a pesar de sus orígenes en los climas templados del hemisferio norte, entonces este punto es irrelevante. Pero, si sostenemos que la Astrología tiene tanto que ver con el lugar como con el tiempo, que nuestra relación experimental con el lugar es importante, entonces esta es una idea digna de consideración seria.

Ahora, es importante notar que la naturaleza básica de los signos sigue siendo la misma (es decir, un Aries sigue siendo un Aries), pero la diferencia estacional significa que la mezcla de cualidades elementales cambia. Teóricamente, esto provocará un cambio en la forma en que un signo se expresa en el hemisferio sur, aunque la naturaleza intrínseca del signo no ha cambiado.

Antes de describir la probable diferencia en la expresión de cada signo en el hemisferio sur, vale la pena resaltar los principales puntos de diferencia entre la combinación elemental de signos en los hemisferios norte y sur.

Primero, muchos de los signos simplemente intercambian su modo de expresión con otro signo de la misma triplicidad.

Vemos esto a continuación en relación con los signos: Aries y Sagitario, Géminis y Libra, Virgo y Capricornio, y Cáncer y Piscis.

Segundo, los tres signos puros en el hemisferio norte, Leo, Géminis y Piscis, se convierten en signos mixtos en el hemisferio sur. Mientras tanto, los tres signos mixtos en el hemisferio norte, Tauro, Cáncer, Libra, se convierten en signos puros en el hemisferio sur. Por lo tanto, el hemisferio sur pierde el signo de fuego puro en Leo, pero gana un signo de tierra puro en Tauro.

En tercer lugar, los signos del hemisferio sur que difieren notablemente de sus homónimos del hemisferio norte son, como cabría esperar, los que se encuentran en el medio de sus estaciones respectivas, a saber, Leo, Tauro, Escorpio y Acuario.

Signos de aire:

• Géminis es el signo de aire puro en el norte (caliente y húmedo, caliente y húmedo), pero en el sur se convierte en un signo mixto que tiene todas las cualidades (caliente y húmedo, frío y seco). Un Géminis del sur, entonces, es menos enérgico y tiene las cuatro cualidades para expresar. Este Géminis trata de ser todo para todas las personas.
• Libra en el sur es el tipo de aire puro, el último signo de aire. Un tipo entusiasta al que le gusta moverse y socializar. Este Libra es la "vida de la fiesta".
• Acuario en el norte es básicamente húmedo (caliente y húmedo, frío y húmedo), sin embargo, en el sur es mucho más cálido y seco (caliente y húmedo, cálido y seco). Un Acuario del sur, entonces, es muy enérgico y es más una "persona de ideas" que un "jugador de equipo".

Signos de fuego:

• Leo es el signo de fuego puro en el norte (caliente y seco, caliente y seco), pero en el sur se convierte en un signo mixto que tiene todas las cualidades (caliente y seco, frío y húmedo). Un Leo del sur, entonces, tiene las cuatro cualidades para expresar, pero con menos energía para hacerlo. Este es un Leo más relajado y genuinamente gregario.
• Sagitario en el norte es básicamente seco (caliente y seco, frío y seco), sin embargo, en el sur es mucho más cálido y húmedo (caliente y seco, cálido y húmedo). Un Sagitario del sur, entonces, es un signo muy enérgico y es más sociable que su homónimo del norte.
• Aries en el norte es básicamente cálido y húmedo (caliente y seco, caliente y húmedo), sin embargo, en el sur es más frío y mucho más seco (caliente y seco, frío y seco). Un Aries del sur, entonces, es menos enérgico y más dogmático que su homónimo del norte.

Signos de tierra:

• Tauro en el norte es un signo mixto, más cálido y húmedo de lo que cabría esperar de un signo de tierra (frío y seco, caliente y húmedo). Pero en el sur, Tauro se convierte en tierra pura (frío y seco, frío y seco). Un Tauro del sur, entonces, es bastante serio, materialista y cerrado.
• Virgo en el norte es básicamente seco (frío y seco, caliente y seco), sin embargo, en el sur es mucho más frío y húmedo (frío y seco, frío y húmedo). Un Virgo del sur, entonces, es menos enérgico, menos crítico y más sociable que su homónimo del norte.
• Capricornio en el norte es básicamente frío y húmedo (frío y seco, frío y húmedo), sin embargo, en el sur es más cálido y mucho más seco (frío y seco, caliente y seco). Un Capricornio del sur, entonces, es más activo, más realista y menos sociable que su homónimo del norte.

Signos de agua:

• Piscis es el signo de agua pura en el norte (frío y húmedo, frío y húmedo), pero en el sur se convierte en un signo mixto que tiene todas las cualidades (frío y húmedo, caliente y seco). Un Piscis del sur, entonces, tiene las cuatro cualidades para expresar, pero tiene un poco más de energía para hacerlo.
• Cáncer en el sur es el tipo de agua pura, el último signo de agua; baja energía, flexible, comunal.
• Escorpio en el norte es básicamente frío (frío y húmedo, frío y seco), sin embargo, en el sur es más cálido y mucho más húmedo (frío y húmedo, caliente y húmedo). Un Escorpio del sur, entonces, es un poco más activo, menos analítico y más sociable que su homónimo del norte.

Cualidades elementales y temperamento

Como las cualidades elementales se aplican a los signos, también podemos decir que se aplican a los planetas ubicados en los signos del horóscopo. Una aplicación práctica de este sistema, entonces, es que podemos enumerar las ubicaciones de los signos de los planetas en una carta natal y sumar las cualidades elementales de los planetas por signo, así como por estación o temporada, para ver qué caracterización general se ajusta mejor a la persona.

Bibliografía

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Tablas: Lady Amalthea © 2020

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