Métodos de Empleo y Naturaleza de las Estrellas Fijas

Las estrellas fijas (del latín stellae fixae) son objetos celestes que no parecen moverse con respecto a los otros astros del cielo nocturno. No son en realidad fijas, dado que se mueven un grado de arco de circunferencia cada 72 años aproximadamente. El Sol es una estrella más, y si cada 72 años recorre un grado, necesitará 2160 años para recorrer los 30 grados de cada signo zodiacal o una era, arrastrando con ello a todos los planetas que giran en torno a nuestra estrella, el Sol.

Desde siempre se ha considerado la influencia de las estrellas como un aspecto o factor más a considerar en el análisis de una carta natal. Cuanto más potente o de mayor magnitud sea una estrella y cuanto más cerca esté de un planeta o punto importante de la carta astrológica, más intensa y significativa será su influencia.

Las estrellas en la eclíptica dan la sensación de estar dentro del mismo nivel. Las estrellas fijas cercanas a la eclíptica son generalmente aquellas de las constelaciones del zodíaco. Como la estrella Regulus para Leo, Aldebarán para Tauro, Antares para Escorpio, etc. A estas estrellas les podemos dar un orbe de 2 – 3 grados, según si son de primera o segunda magnitud, ya que sus efectos son fuertes en el sentido de que sus mensajes se transmiten alto y claro.

Métodos de Empleo de las Estrellas Fijas

Existen dos métodos para emplear las estrellas fijas y las constelaciones para propósitos astrológicos:

a) La astrología visual de los parans.

b) El método de la longitud de las estrellas fijas en la eclíptica.

El método de los parans

Un paran se forma cuando una estrella en su ascensión, culminación u ocaso coincide con un planeta también en su ascensión, culminación u ocaso. 

Ejemplo: Si la estrella Regulus asciende en una carta astral mientras que Marte llega al ocaso, existe entre ellos un paran.

Otro punto importante para el estudio de los parans es tener en cuenta cuando está en relación con la ascensión, culminación u ocaso, pues entonces se puede relacionar el paran con una parte de la vida de la persona.

Hay un modo de aplicar cada paran a cada parte de la vida: 

- Ascensión y culminación superior: primeros años y juventud. 

- Ocaso: madurez. 

- Culminación inferior: vejez, final de vida.

El término paran (del griego: paranatellon o paranatello), puede referirse a dos prácticas astrológicas diferentes. 

La primera de ellas hace referencia a la constelación que ascendía con el decanato, habiendo una descripción para cada uno de ellos y para cada grado.

La segunda, consiste en calcular la formación de parans entre planetas y estrellas.

Un paran ocurre cuando una estrella asciende, culmina o está en el ocaso, mientras un luminar o planeta estuviera localizado en uno de los cuatro puntos de encuentro de la eclíptica con el meridiano local. El astro tiene que estar en conjunción a un ángulo, pero la estrella no, porque todo el plano del horizonte es utilizado para ella, por lo tanto, basta que la estrella esté próxima a uno de los cuatro puntos cardinales locales.

Los parans se forman por las estrellas en ascensión, culminación y ocaso en el horizonte local con las posiciones de los astros en la eclíptica. La formación de un paran es importante porque promueve la intersección simultanea del planeta, y de la estrella con la Tierra.

El término paran es muy conocido por los astrólogos por su utilización en la Astro*carto*grafía, pero su origen está en el método original de aplicación las estrellas fijas en un horóscopo.

En el cristianismo suele utilizarse el símbolo de la cruz de para mostrar cómo el mundo mortal puede llegar a ser divino o cómo puede alcanzar lo divino. La imagen de una cruz dentro de un círculo era y sigue siendo un símbolo de cómo la Tierra toca el Cielo Divino. Si una estrella y un planeta estaban en esta cruz al mismo tiempo, esto se conoce como una relación paran, una unión de la estrella (lo divino) con el planeta, (lo mundano), y la Tierra misma. 

La forma egipcia y mesopotámica de vincular estrellas con planetas era observar cuando una estrella y un planeta “tocaban la Tierra al mismo tiempo”. En astrología esta unión sagrada está representada por los ángulos de la carta astral: Ascendente, Medio Cielo, Descendente y Fondo del Cielo. Este método dejó de emplearse porque era imposible reconstruir los levantamientos de estrellas y sus ajustes para la latitud de nacimiento de una persona sin un astrolabio. Cuando el astrolabio cayó en desuso en el siglo XVII, se produjo el abandono definitivo del trabajo con parans en la astrología. 

El Método de Ptolomeo

En el libro I del Tetrabiblos, Ptolomeo propuso naturalezas planetarias para 48 constelaciones y destacó solamente cerca de 15 estrellas. Ptolomeo sugirió la proyección de las estrellas en la eclíptica, utilizando para eso los polos de la eclíptica y desconsiderando la variación de sus distancias, propuso para las estrellas un método similar a aquel utilizado para los planetas. Pero los planetas conocidos por los antiguos, hasta Saturno, estaban muy próximos a la eclíptica, y las posiciones de las estrellas poseen variaciones muy grandes.

Según Ptolomeo, las estrellas muy distantes unas de la otras pueden ser encontradas en un mismo grado de la eclíptica. Este es el caso de Spica, que verdaderamente está sobre la eclíptica, y Arcturus, que está muy distante de este círculo. Eso también ocurre con Betelgeuse, muy cerca del Ecuador, y de Polaris, la estrella polar del norte.

El método sugerido por Ptolomeo tiene un cálculo bien más simple que el método original, ya que no considera el horizonte local ni la visibilidad de la estrella. En este método la conjunción de una estrella con el Ascendente o el Medio Cielo de una carta natal, no significa que ella ascendió o culminó con uno de estos puntos, porque la posición considerada para la estrella es su proyección en la eclíptica.

El método ptolemaico fue revisado y modificado, en el siglo XV, por Regiomontanus y Ulug Beg; con esto, las posiciones iniciales de las estrellas en la eclíptica fueron cambiadas. El método original fue olvidado, pero, con la llegada de los softwares astrológicos ha resurgido.

En la obra Treatise on the Bright Fixed Stars (Anónimo del año 379) se pondera la necesidad de utilizar los dos métodos en conjunto: el de los parans, para las estrellas distantes a la eclíptica, y el de Ptolomeo, para aquellas próximas a la eclíptica, porque las clasifica por su naturaleza planetaria. Resalta la visibilidad local de las estrellas fijas. Es recomendable utilizar los dos métodos especialmente para hechos o situaciones que se destaquen en un mapa natal indicados por las estrellas, sean buenos o malos. 

Naturaleza de las estrellas fijas

El poder y la naturaleza de las estrellas fijas se toma de acuerdo a la similitud de los poderes y naturalezas de los planetas, sugeridos por su color, de acuerdo con Ptolomeo.

Las estrellas fijas indican los hechos espectaculares –buenos  o malos– de una vida.

La obra Treatise on the Bright Fixed Stars, Anonymous of the Year 379, destaca lo siguiente:

I. Estrellas de naturaleza Venus-Mercurio: Spica, Vega, Deneb, Fomalhaut

[...] hacen a los nativos bien conocidos, famosos e ingeniosos, pero también muy instruidos y eruditos, aficionados a las disertaciones filosóficas, elocuentes, creativos, perspicaces, ingeniosos e inteligentes, inclinados a la música y las artes y de buen corazón. Estos nativos son también muy agradables y atractivos, les gustan las cosas bellas y voluptuosas, tienen un paladar delicado y prefieren actividades tranquilas y suaves, son alegres y felices, sabios, sensibles y reflexivos, así como capaces, hábiles y afortunados.

II. Estrellas de naturaleza Júpiter-Mercurio: Alphecca, Castor, Zubeneschamali

[...] los nativos se convierten en aficionados a la literatura y a las humanidades, estudiosos, oradores populares, gente ingeniosa e inteligente, interesados en la música y las artes, personas directas, de buen aspecto, capaz de mantener una gran cantidad de actividades y hábiles en muchas cosas, dignas, muy bien conocidos como piadosos, religiosos, aptos y capaces de hacer negocios o son personas que compran oro y plata y otras riquezas gracias a las relaciones que tienen, las conexiones o el éxito comercial y que mantienen sus nobles sentimientos y su naturaleza, incluso durante sus infortunios.

III. Estrellas de naturaleza Júpiter-Marte: Regulus, Antares, Sirius, Menkalinan, Altair

[...] hacen que los que nacen con una disposición de este tipo se conviertan en ilustres generales que someten a las regiones, las ciudades y los pueblos, los convierte en personas que gobiernan, que se inclinan a la acción y actúan rápidamente, son personas que no son sumisas y no aceptan ser sometidos, personas que hablan francamente, que tienen gusto por la lucha y disfrutar de combates.

IV. Estrellas de naturaleza Júpiter-Saturno: Rigel, Algol, Rukbat Alrami, Capella, Alnilam

[...] los nativos poseen una gran cantidad de cosas, son muy ricos y tienen posesiones en varios países y ciudades, son personas amantes del campo y tienen una inclinación por ser muy hábiles en la construcción de casas. 

V. Estrellas de naturaleza Marte: Pollux

[...] persona que ha nacido apta para estar al mando, hábil, experta e inteligente, enérgica y vigorosa, activa, temeraria e imprudente, no es sumisa y no acepta ser dominada o sometida.

VI. Estrellas de naturaleza Marte-Mercurio: Bellatrix, Procyon, Alpheratz, Betelgeuse, Vindemiatrix, Scheat

[...] líderes, gente que es valiente, capaz, hábil, fuerte y vigorosa, así como llena de energía, versátil, astuta y sagaz, estas personas son capaces de hacer un montón de actividades variadas y son competentes en muchas cosas. Estas estrellas también dan lugar a gente sabia y sensata, con una voz aguda, y personas engañosas, hacen que la gente tenga éxito y tenga buenos resultados, son obstinados y impetuosos, impulsivos, insaciables y codiciosos en sus deseos, que corrompen tanto a jóvenes como a doncellas, son perjuros y juramentadores.

VII. Estrellas de naturaleza Venus-Júpiter: Rigel Kentaurus (o Toliman), Achemar, Arcturus

[...] los nativos se vuelven puros y honestos, encantadores, atractivos y agradables, aficionados a la música, apegados a sus amigos y amables, piadosos, liberales, generosos y espléndidos, sabios y sensatos, aficionados a escuchar a otras personas. Son hombres de buen juicio y dan buenos consejos, tienen una mente noble y majestuosa, un buen corazón, son personas de buenos sentimientos, dueños de sí mismos y moderados en los placeres del amor y están muy favorecidos por las mujeres.

VIII. Estrellas de naturaleza Venus-Saturno: Denebola, Alphard, Zosma

[...] estas estrellas hacen prósperos a los nativos, les hacen tener muchas posesiones y son muy bien conocidos, y también son personas que están sujetas y son esclavas de pasiones, hacen cosas obscenas e indecentes o hablan afeminadamente.

IX. Estrellas de naturaleza Marte-Venus: Aldebarán

[...] esta estrella hace prósperos a los nativos, y muy ricos, y que puedan someter y gobernar pueblos, ciudades y regiones.

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Bibliografía:

BERANGER, Celisa. (2006): “Estrellas Fijas – Los Dos Métodos”, en X Encuentro entre Astrólogos, Gente de Astrología-GeA 2006, Buenos Aires, Argentina.

DYKES, Benjamin N. (2009): Persian Nativities I: Māshā’allāh’s The Book of Aristotle, Abū ‘Ali al-Khayyāt’s On the Judgments of Nativities, Minneapolis, MN, The Cazimi Press.

PINGREE, David. (2001): “From Alexandria to Baghdād to Byzantium. The transmission of astrology,” en International Journal of the Classical Tradition, Nº 8, 1, páginas 3-37.

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SANTOS, Demetrio. (1987): Claudio Ptolomeo, Tetrabiblos o Quadripartitum: El fundamento de toda Astrología, traducción: Demetrio Santos ), Valladolid, España, Editorial Barath.

Fuentes clásicas:

Anonymous of the Year 379: Treatise on the Bright Fixed Stars, traducción de Robert Schidmt (1993) Vol. IIA, Virginia Occidental, USA, Project Hindsight, Golden Hind Press, Berkeley Springs.

Claudius Ptolemaeus: Tetrabiblos, traducción de Frank E. Robbins (1940), Cambridge, Mass.: Harvard University Press, London, W. Heinemann. LacusCurtius.

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